Nació en Amiens el 29 de agosto de 1709, murió en la misma ciudad el 16 de junio de 1777. Ingresado a los dieciséis años en la Compañía de Jesús, estuvo enseñando en varios colegios y componiendo al mismo tiempo versos satíricos o festivos, hasta que Vert-Vert (1734, v.), al que pronto siguió otro poemita, El atril viviente (v.), le proporcionaron en aquel campo notoriedad europea. Mostráronse suspicaces los padres jesuitas de los gustos mundanos de G. y censuraron su vena anticlerical.
Como no había pronunciado todavía los votos, le aconsejaron que abandonara la Orden. Marchó, por lo tanto, a París y probó fortuna en la tragedia (Edouard III, 1740), en la comedia (Sidney, 1745) y en la ópera (El maligno, 1747, v.). En 1748 ingresó en la Academia. Se enamoró luego de una mujer de carácter alegre como el suyo y, célebre ya, decidió inesperadamente retirarse a Amiens (1751) para fundar allí una escuela literaria. Parece también que cayó en desgracia a causa de la imprudencia de ciertas sátiras suyas. En sus últimos años, recuperado el favor de la corte, consagróse íntegramente a prácticas de devoción y renunció al teatro hasta el punto de destruir por escrúpulos religiosos dos comedias ya terminadas.
S. Morando