Nació en Ferrara en 1504, murió en la misma localidad en 1573. Alumno del Estudio de su ciudad natal, enseñó después Medicina, Filosofía y Literatura. Fue secretario del duque de Ferrara de 1547 a 1563, año en que, por una disputa surgida por cuestiones de prioridad literaria entre él y el otro secretario, Giambattista Pigna, se vio obligado a retirarse. Aceptó la oferta del duque de Saboya y pasó al Estudio de Mondovi; estuvo después en Turín, en Pavía en 1571, y finalmente, de nuevo en Ferrara.
Vivió enseñando y escribiendo. En el curso de muchos años compuso una colección de cuentos, Los Hecatónmitos (v.), y se reveló como escritor de imaginación, ampuloso y moralizador. Precisamente por aquellos años en que se discutían y se difundían los cánones de la Poética de Aristóteles, y la Reforma católica iba influenciando también la producción artística, supo conciliar clasicismo y moralismo a imitación de Séneca. De esta conciliación nacieron sus nueve tragedias, la primera y la más célebre de las cuales es Orbecche (v.), en la que la purificación se alcanzaba mediante el horror y la piedad cristiana de casos extremadamente atroces; fue la primera tragedia italiana representada (Ferrara, 1541). Del mismo modo moralizó los héroes de la épica en el poema Ercole (v.), quiso reanudar con Egle el ejemplo clásico del drama satírico, al mismo tiempo que respondiendo a lo que al cabo era, un erudito, iba poco a poco teorizando con sus famosos Discorsi (v. Discurso acerca del componer poemas novelescos y Discurso acerca del componer comedias y tragedias).
Su importancia estriba ante todo en el hecho de que fue el primero de los literatos italianos del siglo XV que trabajó asiduamente para el teatro, que lo intentó en varias direcciones y que acercó con sus obras al . público italiano a la escena trágica, abandonada desde hacía siglos.
F. Doglio