Nació posiblemente en 1470 en Évora y murió el 3 de noviembre de 1536. Es uno de los personajes más completos del renacimiento portugués : fue poeta, cronista, músico, arquitecto y dibujante. Hijo de unos criados del obispo de la mencionada ciudad, a la muerte de su padre quedó confiado, todavía niño, a los cuidados de un tío, apreciado juez del palacio real. Acogido muy pronto en la corte como servidor personal de João II, supo conquistar su simpatía y su estimación, cosa nada fácil. Y así, el soberano envióle (1490) junto a su hijo Alfonso cuanto éste pasó a tener una corte propia. Sin embargo, fallecido trágicamente el infante el año siguiente, Resende fue de nuevo secretario particular del monarca, y permaneció incluso al servicio de su sucesor, el gran rey Manuel, al advenimiento de éste en 1495. En 1498 acompañó a los soberanos portugueses en su viaje a España, donde, en Toledo, prestaron juramento como herederos de los Reyes Católicos.
En 1514 participó en funciones de secretario-tesorero en la famosa embajada, llamada «del elefante» y dirigida por Tristão da Cunha, que Don Manuel envió al papa León X para felicitarle con motivo de su elevación al trono pontificio. En 1516 el monarca le hizo gentilhombre de corte y administrador de los bienes del infante Don Juan, el cual le mantuvo asimismo a su servicio cuando ciñó la corona real (1521). Hasta dos años antes de su muerte no abandonó Resende la corte; y ello, siquiera por voluntad propia, muy a pesar suyo y debido a cuestiones de salud. La desahogada existencia junto a tres soberanos, raro ejemplo de lealtad y gratitud, permitióle no solamente legar bienes y dinero a sus descendientes, sino también atender las propias y múltiples iniciativas artísticas y literarias; entre éstas cabe recordar la crónica en trescientas «décimas» Miscelânea e variedade de historias y la importante colección Cancioneiro Geral (1516), conocido también por Cancionero de Resende (v. Cancioneros portugueses) y a la cual se debe principalmente la conservación de las composiciones líricas escritas en la lengua dé Portugal durante la segunda mitad del siglo XV y los primeros años del XVI. En dicho Cancionero figuran las Estancias por la muerte de Inés de Castro, originales de nuestro autor y primer eco literario directo de la leyenda de Inés (v. Castro).
G. C. Rossi