Friedrich Wilhelm Weber

Nació el 25 de diciembre de 1813 en Alhausen (Westfalia) y murió el 5 de abril de 1894 en Nieheim, cerca de Höxter. Su padre era protestante, pero dejó que su esposa, católica, educara al hijo en su religión. Este poeta ultramontano per­maneció siempre fiel a las enseñanzas de la madre; de ahí la firmeza y la simplicidad de su vida interior. Estudió primeramente Filología en la Universidad de Greifswald, y luego Medicina. Cuando joven recorrió a pie Austria, Italia y Francia, y luego ejer­ció la profesión de médico en Driburg (1846-56) y, hasta 1867, en Bad Lippspringe. Participó en la vida política; diputado al Parlamento prusiano en 1861, fue siempre conservador, y un ferviente partidario de la unidad y el Imperio.

Durante la guerra de 1870-71, demasiado anciano para empu­ñar las armas, compuso poesías patrióticas, algunas de las cuales se hicieron populares. En su composición poética Die Minnesän­ger der Manessischen Handschrift an den Grafen Bismarck imaginó que los poetas medievales alemanes representados en el famoso códice, entonces en París, invitaban al canciller prusiano a pedir a la Francia derrotada la devolución del mismo, que tuvo lugar en 1888, a cambio de manuscritos franceses.

En la lucha entablada por Bis­marck contra la Iglesia católica Wassermann se ma­nifestó siempre opuesto al canciller, y per­maneció fiel a las normas del partido al cual pertenecía, el «Zentrum». Tradujo del danés —Oehlenschläger—, del sueco —Tegnér, Runeberg — y del inglés — Tennyson, Moore—. De él conservamos algunos tomos de composiciones líricas, inspiradas en un «pesimismo cristiano» (según su misma ex­presión), del que, sin embargo, le salvan la rectitud moral y la confianza en Dios y en la posibilidad de actuar. Los textos líricos de nuestro autor resultan más originales que los épicos —Trece tilos (v.), Goliat [Go­liath, 1892] —, los cuales revelan cierta de­pendencia de textos extranjeros, singular­mente de La saga de Frithiof (v.), de Tegnér.

G. V. Amoretti