Nació el 3 de febrero de 1809 en Hamburgo, murió el 4 de noviembre de 1847 en Leipzig. Mendelssohn forma con Schubert y Schumann el gran triunvirato del romanticismo musical alemán específicamente en el campo de la música instrumental y vocal de cámara. De familia judía, hijo del banquero Abraham y de Lea Salomón, y nieto por línea paterna del insigne filósofo Moisés Mendelssohn (v.), fue bautizado y educado por su padre en la fe protestante, juntamente con su hermana mayor Fanny, la cual, también precoz en cuanto a dotes musicales, le acompañó en jiras de conciertos en edad todavía adolescente. A partir de 1811 la familia Mendelssohn se estableció en Berlín, donde Félix, además de los estudios musicales, en los que fue dirigido por Klein, Berger y Zelter, cultivó seriamente los literatos, hasta el extremo de que llegó a leer de un modo corriente los textos clásicos griegos, y siguió los cursos de filosofía de Hegel. Apareció por primera vez en público a los nueve años: a los once componía ya una fuga, y poco después otros diversos fragmentos.
En 1821 conoció a Weber y a Goethe; estimado y admirado por el segundo, lo visitó en Weimar muchas veces. En 1822 conoció en Francfort al joven músico Femando Hiller, que había de convertirse en uno de sus mejores amigos. En 1824 recibió algunas lecciones de piano de Moscheles, el cual pronto se hizo amigo y admirador suyo. El mismo año recibió como regalo de Zelter una copia de la Pasión según S. Mateo (v.) de Bach, que había de ser años después precioso instrumento ^ de exhumación de aquella obra maestra en Berlín (v. Bach). En 1825 hizo un viaje a París, donde no recibió favorable impresión del ambiente musical: Cherubini le alentó, pero no tanto Auber y el violinista Baillot. El mismo año, en Berlín, la familia Mendelssohn abandonó su vieja casa para trasladarse a otra más grande, con patio y parque, en la Leipzigerstrasse, que había de ser en los años siguientes un centro de reunión artístico y cultural, al que conferían atractivo, además de Mendelssohn, sus hermanas (la ya citada Fanny y la culta Rebeca) y su hermano Paul, buen violoncelista: se hacía música, se conversaba de literatura, etc. En aquel período nacieron sus primeras obras maestras, como el octeto para arco, la obertura para el Sueño de una noche de verano (v.) de Shakespeare, tanto más prodigiosos cuando se piensa que el compositor contaba diecisiete años; y al año siguiente, la que puede llamarse única ópera teatral escrita por él, Les noces de Camacho, según el relato de Cervantes.
En el mismo año visitó varias ciudades alemanas: de regreso a Berlín compuso entre otras obras la obertura El silencio del mar [Meeresstille]« El 10 de marzo de 1829, siempre en Berlín, dirigió la famosa exhumación de la Pasión según S. Mateo, que despertó gran entusiasmo y fue repetida el 21 de marzo, día del aniversario del nacimiento de Bach. En el mismo año, hizo un viaje a Inglaterra, Escocia y las islas Hébridas, de donde extrajo inspiración para obras importantes y significativas como la Sinfonía escocesa (v. Sinfonías), y la obertura La gruta de Fingal (v.); fue presentado, además, en la Sociedad Filarmónica de Londres como pianista y director de orquesta. De regreso a Berlín, todavía en el mismo año, terminó la Sinfonía de la Reforma, op 107 (v. Sinfonías); emprendió después un viaje a Italia y por el camino se detuvo en Weimar, donde tuvo otro encuentro con Goethe; pasó después por Munich, donde se entrevistó con dos jóvenes músicos, Josefina Lang y Delfina de Schaurot; prosiguió su camino por Viena y llegó en fin a Venecia, Roma, Nápoles y Milán, donde conoció a la baronesa Ertmann, discípula de Beethoven, y a un hijo de Mozart. Recibió en Italia profundas impresiones de la naturaleza y del arte, y quedó conmovido íntimamente por la polifonía de Palestrina; extrajo además, de ella, inspiración para la sinfonía llamada Italiana (v. Sinfonías), y compuso la cantata La noche de Walpurgis [Die erste Walpurgisuacht].
Después de diez meses de estancia en Italia, hizo un recorrido por Suiza, Francia, Inglaterra y de nuevo por Alemania (en 1831 estuvo durante dos meses en Munich). De allí marchó luego a París (1831), donde permaneció durante cinco meses. Aquí le leyó Liszt su manuscrito del Concierto en sol menor para piano, que Mendelssohn había ejecutado ya en Munich. En contacto con el rico y heterogéneo «milieu» musical parisiense, recibió Mendelssohn impresiones variadas y no le faltaron satisfacciones: veladas dadas en su honor por Baillot y Habeneck, como igualmente ejecuciones de obras importantes realizadas por él y por otros. También en aquel tiempo sufrió el dolor de la muerte de su amigo de la infancia, el violinista Rietz, de Goethe y de Zelter. Vuelto a su patria, después de un nuevo viaje a Inglaterra no consiguió Mendelssohn suceder a su maestro como director de la Singakademie de Berlín; pero como compensación fue nombrado «director de música» en Düsseldorf, y conservó este puesto desde 1833 a 1835. Se ocupó de música sacra y visitó las bibliotecas de provincias, de las que extrajo obras clásicas de la polifonía italiana. Se esforzó también por mejorar las condiciones del teatro de la ópera. Es de estos años la composición Paulus (v.), terminada en 1835 y ejecutada por primera vez en Düsseldorf en 1836.
Todavía en 1835, año en que murió su padre, dirigió el Festival de Colonia; recibió el ofrecimiento de una cátedra en la Universidad de Leipzig, que rechazó, aceptando en cambio el puesto de director de la Sociedad de Conciertos de Gewandhaus en la misma ciudad. Habiéndose trasladado a su nueva residencia en 1835 (en cuyo año recibió una visita de Chopin), allí permanecerá la mayor parte del resto de su vida. Fue aquél, en conjunto, el período de mayor esplendor de su actividad artística en sus diferentes aspectos de director, pianista, divulgador de obras propias y de otros grandes, no sólo de clásicos famosos, sino también contemporáneos, como su amigo Schumann, Berlioz, Wagner (obertura de Tannháuser); llamó junto a sí como ayudante al violinista Fernando David. En 1836 conoció en Francfort a Cécile Jeanrenaud, hija de un pastor de la Iglesia francesa reformada, con la que se casó al año siguiente, y de su feliz matrimonio nacieron cinco hijos. En 1840 dirigió nuevamente la Pasión según San Mateo de Bach, esta vez en la misma Thomaskirche de Leipzig, donde más de un siglo antes había tenido efecto la primera ejecución de la obra maestra. En 1841, por invitación del rey de Prusia, marchó a Berlín, encargado de dirigir una sección de la Academia de Bellas Artes, de fundar un conservatorio y de dirigir conciertos. Permaneció allí un año, y luego pasó algunas temporadas en Leipzig. En 1842 perdió a su madre.
Aquel mismo año terminó la Sinfonía escocesa, que ejecutó después en Londres, dedicándola a la reina Victoria. Al año siguiente se inauguró bajo su dirección el Conservatorio de Leipzig; en 1843 también, terminó Mendelssohn la música para el Sueño de una noche de verano. En 1845 abandonó definitivamente Berlín para trasladarse de nuevo a Leipzig, reanudando la dirección de la Gewandhaus y del Conservatorio. En 1846 terminó obras muy importantes, entre las cuales el oratorio Elias, cuya primera ejecución dirigió en Leipzig. En el año de vida que le quedaba, bosquejó otras obras, entre las cuales el oratorio Christus, que quedó incompleto. En febrero de 1847 hizo un último viaje a Londres, de regreso del cual, en Francfort, se enteró de la muerte de su hermana Fanny: fue un golpe decisivo para su salud, ya probada y consumida en los últimos años por trabajos y dolores. Murió, quizá de apoplejía, tras un proceso de síncopes y vértigos.
F. Fano