Nació en Burano el 18 de octubre de 1706, murió en Venecia el 3 de enero de 1785. Fue llamado «el Buranello» por su lugar de nacimiento. Su primer maestro fue su padre, barbero y violinista. En 1722, a los dieciséis años, hizo representar su primer trabajo, La fede nell’ incostanza (ossia Gli amici rivali) en Vicenza y en Chioggia. El fracaso le impulsó a perfeccionar sus estudios musicales, bajo la dirección de Lotti.
En colaboración con su alumno Pescetti, representó en Venecia Gli odi delusi dal sangue (1728) y Dorinda (1729). Con L’odio placato (1729) G. inició su afortunada carrera de autor de óperas aclamado y solicitado por todos los teatros de Europa, excepto los de Italia meridional, donde sus obras sólo aparecieron de tiempo en tiempo. En 1740 fue nombrado maestro de coro en el Ospitale dei Mendicanti; invitado a Londres, en 1741-42 hizo representar allí sus óperas Penelope, Scipione in Cartagine, Enrico y Sirbace, con éxito creciente y dejando una notable huella en el mundo musical inglés. Vuelto a Venecia, reanudó su diligente actividad: a Adriano in Siria (1740) y a Didone abbandonata (1741), las obras más significativas, escritas por G. antes de su viaje a Londres, se añadieron, entre otras, La forza d’amore (1745), Il protettore alla moda (1747), L’Olimpiade (1747), Olympia (1749), Artaserse (1749), Semiramide reconosciuta (1749) y Demofoonte (1749). Entretanto, en 1748 había sido nombrado segundo maestro de capilla de S. Marcos.
Pero el año decisivo para la actividad creadora de G. fue 1749, que vio el comienzo de su larga colaboración con Goldoni, la cual produjo más de 18 obras, entre las cuales son las más significativas Arcifanfano, re de’matti (1749), II mondo della luna (175Ó), Il paese della cuccagna (1750), Il mondo alla roversa (1750), Le virtuose ridicule (1752), El filòsofo campestre (1754, v.), La diavolesa (1755), La donna di governo (1764) y La cameriera spiritosa (1766), última de la serie. La colaboración con Goldoni influyó beneficiosamente en la ya natural tendencia de nuestro compositor a una incisiva definición de los caracteres, a una eficaz plasticidad de las frases vocales e instrumentales. La larga e intensa colaboración con el gran comediógrafo no impidió que el infatigable G. continuara trabajando en la ópera seria ni que dejara de recurrir a otros libretistas, en primer lugar a Metastasio: particularmente importantes son L’eroe cinese (1753), Il re pastore (1758), L’amante di tutte (1760) y Li tre amanti ridicoli (1761), con libreto de su hijo Antonio, e II marchese villano (1762).
Es éste también el período más denso de la actividad de G. como compositor de música instrumental. Sobresalen en este campo las cincuenta y una Sonate para clavicémbalo. Nombrado en 1762 maestro de capilla de S. Marcos y director del Conservatorio de los Incurables, fue invitado G. por Catalina II de Rusia a Petersburgo, donde permaneció de 1765 a 1768; allí obtuvo clamorosos éxitos, especialmente con Ifigenia en Tauride. Vuelto a Venecia, redujo cada vez más su actividad como autor de óperas, que se cierra definitivamente con La serva per amore (1773). Se dedicó después de un modo exclusivo a la composición de música eclesiástica y de oratorios: su última ^creación fue II retornó di Tobia, con texto de Gas- pare Gozzi (1783).
C. Marinelli