Alfonso Corti

Nació en Gambarana (Pavía) el 5 de junio de 1822, hijo del marqués Gaspare Giuseppe y de la marquesa Beatrice Malaspina di Carbonara; murió en Casteggio (Pavía) el 2 de octubre de 1876.

Se inscribió en la Facultad de Medicina de Pavía en 1841 y fue alumno de Panizza y de Rusconi, pero logra la licenciatura en Viena, donde habíase perfeccionado en la escuela anatómica de Hyrtl.

Permaneció un año más en aquella ciudad en calidad de ayudante no retribuido del Instituto Univer­sitario de Anatomía, pero al año siguiente (1848) hubo de abandonarla a causa de la revolución.

Tras una breve estancia en Zurich, se detuvo en Wurzburgo, donde asistió a la escuela de Kólliker. En 1850 publica un notable trabajo sobre la retina y en el mis­mo año marcha a Holanda para perfeccio­narse en la técnica de la conservación de los preparados, en el Observatorium Microcospicum de Utrecht, dirigido por Herting.

A fines del mismo año regresó a Wurzburgo y en los primeros meses de 1851 tenía ya dis­puesto su trabajo sobre el laberinto del oído, que fue publicado en francés el 30 de junio de aquel año en la Zeitschrift fiir wissen- schaftliche Zoologie (vol. III, págs. 109-169) con el título Récherches sur l’organe de Vouie des mamiféres (v. Investigaciones so­bre el órgano del oído de los mamíferos).

Inesperadamente regresa a Italia, y en Turín prosigue sus estudios en el laboratorio del Museo Zoológico dirigido por Filippo da Filippie, donde realiza su último trabajo sobre la histología de varios órganos del ele­fante.

Atacado por una grave artritis defor­mante y por ello imposibilitado de conti­nuar sus investigaciones, se retiró a la vida privada en una villa de su propiedad, donde se dedicó a la enología y en general a la agricultura, convirtiendo su hacienda en una verdadera granja modelo y donde fallece poco antes de cumplir los cincuenta y cin­co años. Su nombre ha quedado vinculado a los estudios sobre el órgano del oído.

A. Pazzini