Escritor argentino nació en Tulchin, población rusa de Ucrania, región de Vinnitsa, en 1884, y murió en Buenos Aires en 1950. De familia de emigrantes judíos que se establecieron en territorio argentino de Villaguay (Entre Ríos), pronto se incorporó a la vida nacional como periodista en el diario La Nación, del que en diversas ocasiones fue corresponsal en el extranjero, principalmente en Chile; fue también vicedirector del Boletín del Ministerio de Instrucción Pública (1904 a 1915) y director de El Mundo (1927).
Explicó Literatura en el Colegio Nacional Belgrano y en el Colegio del Pilar, del que fue vicedirector. Se distinguió como conferenciante en el Ateneo de Madrid (España) durante un viaje a Europa que hizo en 1914. Militó en el partido demócrata progresista. Gerchunoff es novelista y ensayista de brillante estilo, a veces un tanto retórico y siempre documentado. Su obra más conocida es la colección de cuentos y cuadros de costumbres titulada Los gauchos judíos (v.).
Ataca el caudillismo simbolizado por Hipólito Yrigoyen en El hombre importante (1934); cultiva el ensayo en El nuevo régimen, El cristianismo precristiano, Roberto J. Payró (1925) y El retomo de Don Quijote (póstumo, 1951); pero es en el cuento donde encontramos sus mejores calidades, como vemos en la obra a que ya hemos aludido (Los gauchos judíos) y en las narraciones de La jofaina maravillosa. El escritor hebreo de Entre Ríos nos ha dejado también otros trabajos con el título: Cuentos de ayer (1919), La asamblea de la buhardilla, Los amores de Baruj Espinoza, La clínica del doctor Mefistófeles, La aldea embrujada, Entre Ríos, mi país, etc.
J. Sapiña