El pensador uruguayo Carlos Vaz Ferreira (n. en 1872) dictó en 1908, desde su cátedra de la Universidad de Montevideo, algunas lecciones para un curso de Moral, cuya versión taquigráfica pasó a ser, con breves variaciones, el libro aparecido en 1920. Tal es el origen de Moral para intelectuales, la obra en que el filósofo uruguayo — decano que fue de la Facultad de Humanidades y Ciencias de Montevideo — expone de modo afirmativo y categórico su pensamiento, explanado después desde el paraninfo universitario como Maestro de Conferencias, elevado cargo exclusivamente creado’ para él. Vaz Ferreira declara que no pretende crear moralidad, sino enseñar a «sacar partido de la moralidad que se tiene». Por esto anhela que cada uno se distinga por «la continua atención moral hacia sí mismo». Vaz Ferreira propone diversos problemas y ejemplos permanentemente actuales, relacionados con la moralidad de los estudiantes, de los abogados, de los periodistas, de los funcionarios, en particular con la moral de los intelectuales. Sin organizar, ni estructurar ningún sistema, completa sus observaciones filosóficas con algunas consideraciones sobre moral de la vida pública, el carácter, concepto de «teóricos y prácticos», ideas de «progresistas y retardatarios», la psicología de la conciencia moral, actitud hacia los sistemas y actitud ética en general. Vaz Ferreira no suele dar soluciones: toma ejemplos y los diseca, disociando su contenido moral. «La moral de cada uno —concluye Vaz Ferreira —, más bien que un sistema, debería ser un estado vivo».
J. Pereira Rodríguez