[A nagyidai cigányok]. Poema heroicocómico del poeta húngaro János Arany (1817 – 1882), publicado en 1852. Los ejércitos imperiales, acaudillados por Miguel Puck, sitian inútilmente durante varios días la fortaleza de Nagyida, defendida heroicamente por los zíngaros, a cuyo frente se halla su jefe Csóri.
Los asaltantes se hallan dispuestos a levantar el asedio, cuando los zíngaros gritan diciendo que están faltos de pólvora, de forma que nada cuesta a los ejércitos imperiales expulsarlos de la fortaleza. La sátira política es evidente. El autor nos pinta los rasgos caricaturescos de los guerreros de ambos ejércitos: por un lado la metódica estupidez de los imperiales, a cuyo entender lo que decide, en todo momento, es la regla y no la vida real; de otra parte, el jefe de los zíngaros Csóri, que «duerme en nombre de una nación», y las indisciplinadas tropas que le rodean. El poema fue suscitado por la derrota sufrida por el país en la guerra de la independencia de 1848; los zíngaros, soñadores e ilusos, son los mismos húngaros. Si bien el poeta trató de calmar su dolor con esta «desesperada carcajada», los contemporáneos acogieron esta sátira con penoso estupor.
M. Benedek