Es el más importante de los léxicos bizantinos, que se atribuye a un cierto Suidas. Parece que puede situarse la fecha de su composición entre 959 y 1175. Quizá pueda aventurarse el fijarla y establecer que se compuso entre el 975 y el 1025, durante el reinado común de Basilio II y Constantino VIII. Los artículos no siguen un orden alfabético, sino fonético, es decir, que las letras están ordenadas de acuerdo con su pronunciación en lengua griega bizantina. Más que un diccionario propiamente dicho, el Suidas es una enciclopedia; en ella alternan los artículos dedicados a la retórica con los que tratan de la moral o de la teología. Lo concerniente a la historia literaria forma un grupo aparte, de infinito valor para nosotros. La documentación para esta parte ha sido tomada de la Nomenclatura o índice de las personas ilustres en sus estudios de un cierto Hesiquio de Mileto, que vivió en el siglo VI.
En esta Nomenclatura los personajes estaban clasificados en seis categorías (poetas, filósofos, historiadores, oradores y sofistas, gramáticos y médicos, escritores de todas clases) y en cada categoría los nombres estaban dispuestos de acuerdo con un orden cronológico. Cada noticia estaba redactada de acuerdo con el siguiente plan invariable: Título del artículo, orígenes del autor, su actividad, nombre de los padres y de los hijos, de los maestros y los discípulos, lugar y fecha de la muerte, lista de sus obras. Sin embargo, la Nomenclatura no ha sido empleada directamente por Suidas, quien se valió de un epítome compuesto entre los años 825 y 858, en el que los artículos originales habían sido abreviados y cambiado su orden de acuerdo con un criterio alfabético, y en el que se habían incluido otros artículos sobre escritores cristianos, que estaban excluidos del Hesiquio auténtico.