El Lexicón o Elementarium doctrinae rudimentum, compuesto por el clérigo Papias hacia 1050, fue dedicado por éste a su dos hijos. La obra, que representa un trabajo de diez años, deriva del Líber Glossarum, repertorio de las expresiones y locuciones de los clásicos, explicadas por los antiguos gramáticos, pero por su más amplia y rica información y compilación superó a su modelo y se mantuvo en uso durante varios siglos. Una vez inventada la imprenta, vio la luz en varias ediciones. Además de un léxico, puede considerarse como una enciclopedia fundamental, ya que el autor añade a la explicación de los términos, definiciones, etimologías, observaciones e informaciones.
Las artes del trivium y el cuadrivium encuentran su explicación bajo las varias voces, si bien la amplitud con que cada una es tratada resulta desigual. Retórica y dialéctica, en el trivium, son objeto de un estudio bastante inferior al de la gramática, el cual, sin embargo, no ofrece ninguna originalidad, ya que depende por completo de los gramáticos antiguos habitualmente leídos en aquella época. Entre las artes del cuadrivium queda descuidada la música, cosa curiosa en un período que vio la forma musical de Guido de Arezzo. Es de notar el interés demostrado por Papias por la medicina, más todavía que por la historia y la geografía. Pero, más que un observador y un pensador original, Papias es un hábil recopilador de la doctrina expuesta en otras obras medievales.
A. Cutolo