Novela del escritor alemán Gustav Frenssen (1863-1945) publicada en 1901. Es uno de los productos típicos de la «literatura del terruño» — «Heimatdichtung» — que en aquella época volvió a ser de actualidad en alemania. El color dialectal del lenguaje en las partes dialogadas, confiere a la novela una particular vivacidad, mientras que el paisaje del Schleswig Holstein, con sus pinares, sus pantanos, sus terrenos carboníferos, sitúa detrás de los personajes un escenario sugestivo que recuerda las nóvelas de Storm.
Jörn Uhl, hijo de un rico campesino, fruto tardío de un matrimonio desigual — el padre robusto y rudo, la madre delicada y sensible —, siempre enfermizo y blanco de las burlas de su padre y de los hermanos mayores, crece solitario y encerrado en sí mismo. La vida disoluta del padre y de los hermanos apresuran la ruina de la casa, y Jörn se ve obligado a abandonar sus estudios ya empezados y a emprender el oficio de sus abuelos. Es aún muy joven cuando se convierte en el dueño de la hipotecada propiedad, asumiendo todas las responsabilidades. Cuando, después de algunos años de duro trabajo casi ha conseguido librar sus tierras de las hipotecas, un rayo cae sobre la casa y la reduce a cenizas. Muerto el padre, muerta su joven y amantísima esposa, dispersos los hermanos por el mundo, Jörn ve destruido su trabajo, pero siente que una inesperada libertad le abre los caminos de su verdadero destino. Entonces se refugia con su hijito en casa de un tío, el buen viejo Thiess, soñador y viajero infatigable sobre los mapas que adornan las paredes de su cabaña entre las hullerías. Y en esta extremada pobreza le sonríe la felicidad en Elizabeth, hija del maestro de escuela y su primer amor, alejado en los años de trabajo pero no olvidado.
Con la ayuda de un viejo compañero reanuda sus estudios predilectos y se convierte en constructor de presas y profesor de matemáticas; Elizabeth está a su lado como una esposa serena y fiel: el destino de Jörn Uhl, campesino de mente aguda y corazón tranquilo se ha realizado. El proceso de maduración del alma de Jörn se cumple gradualmente, por momentos sucesivos, adecuados siempre a la sencilla estructura psíquica de los habitantes de las costas nórdicas, en un clima de fresca y religiosa poesía. Aparte de su valor literario — que es el de una obra de no muy grandes vuelos, pero sincera y honrada —, la novela constituyó uno de los más grandes éxitos editoriales de su tiempo.
Ch. Schimansky