[Versuch, den Begriff der Negativen Gróssen in die Weltweisheit einzuführen]. Ensayo crítico de Immanuel Kant (1724-1804), publicado en 1763. En él examina Kant un término nuevo de la ciencia física, que tenía su correspondiente en la matemática, el de «cantidad negativa». Este término se había entendido por los racionalistas, como Crusius, como oposición lógica, que en la contradicción da como resultado la nada absoluta; es decir, que afirmado un predicado, su negativo es inexistente (si A es verdadero, no puede ser no A). Pero existe otra clase de oposición, a la que Kant llama oposición real, y que sale del campo de la lógica. En ella los predicados se oponen sin contradecirse, son entrambos predicados posibles, y, por tanto, no se excluyen. La negatividad reside solamente en la relación y la consecuencia que se deriva es siempre algo. Por ejemplo: dos fuerzas que actúan en opuesto sentido se equilibran y no dan como resultado el movimiento; pero su equilibrio no resulta de su supresión, porque ambas deben subsistir.
En las matemáticas las cantidades negativas no son negaciones puras y simples de las positivas, sino «faltas» que tienen valor en el cálculo. Ejemplos de este género halla Kant sobre todo en la Psicología; supera así en este campo el concepto racionalista de la irrealidad metafísica de la negación, de Spinoza, y el de la nulidad del mal y del dolor, de Leibnitz. El principio de identidad y el de no contradicción, que para Kant deriva del primero, valen solamente, por tanto, en el campo de la lógica, y no en el de la física ni en el de la metafísica, para las cuales tienen valor el principio real, la fecundidad de la síntesis, la cual parte de la experiencia y no del pensamiento puro. El fijar la atención sobre el resultado positivo que se deriva de la síntesis de las fuerzas opuestas revela ya en el filósofo de Nüremberg el surgir de la existencia de fecundos principios reales que enriquecen el patrimonio de las nociones científicas; principios que más tarde serán identificados en la Crítica de la razón pura (v.), con los juicios sintéticos. Este trabajo se considera, por tanto, uno de los más interesantes para seguir el paso del pensamiento kantiano de la fase dogmática a la fase crítica.
C. Loria