Son la descripción, en cuatro libros, de los acontecimientos del imperio bizantino de 1320 a 1356. La preceden dos epístolas ficticias: Nilo incita a Juan Cantacuzeno (1292-1383 aprox.), que aparece bajo el nombre de Cristódulo, a describir los acontecimientos de los que fue protagonista. Cristódulo promete hacerlo. Impulsado no por el odio y el partidismo, que engendran la mentira, sino por el amor a la verdad, el autor describe a los amigos de la verdad los hechos en que ha intervenido. Los dos primeros libros narran la lucha entre Andrónico II y Andrónico III y el reinado de este último hasta su muerte. Los dos últimos libros están dedicados a la lucha de Cantacuzeno contra la regente Ana de Saboya, y a su gobierno como regente y emperador (Juan VI) hasta la abdicación a consecuencia de la toma de Constantinopla. La obra es rica en detalles biográficos. El autor se complace en hablar de sí mismo y no hace un misterio de sus buenas cualidades ni del poder que gozó; pone de relieve los actos laudables y deja en la sombra los errores, de modo que a menudo, sin alterar la verdad por completo, la impresión general es inexacta. Tampoco los acontecimientos están tratados del mismo modo, pues se valoriza, sobre todo, cuanto se refiere a la vida del autor.
L. Banti