Es la más extensa e importante de las obras históricas de Nicéforo, patriarca de Constantinopla (m. 829). Siguiendo el orden cronológico, narra la historia del Imperio bizantino desde la muerte del emperador Mauricio hasta el matrimonio de León IV, o sea, desde el año 602 hasta el 769. Son interesantes los datos que el autor da acerca de los búlgaros, acerca de su antiguo asentamiento en las proximidades de la laguna Meótida, antes de que, alcanzado el Danubio, entraran en lucha con Bizancio. En general, se concede mayor importancia a las revoluciones, guerras, donaciones a iglesias, disidencias y luchas religiosas, acontecimientos de la capital y del palacio imperial, que a los hechos y evoluciones políticos. El autor, que se dirige a un vasto público para el que naturalmente la política ofrecía menos interés que los acontecimientos locales y las luchas religiosas, escribe en estilo claro y llano, carente de figuras e imágenes retóricas. La obra no parece haber tenido mucha difusión.
L. Banti