El título genuino de este poema, compuesto por un anónimo entre 1162 y 1166, es el que se da en el «explicit» (fin) colocado después del último verso: Gestas del emperador Federico Barbarroja en diversos lugares de Lombardía e Italia [Gesta per impera- torem Federichum Barbam rubeam in partibus Lombardie et Italie]. El autor es un gibelino culto que a lo largo de los 3343 hexámetros de su cantar mantiene un espíritu de serena ecuanimidad y de una amplia visión de las fuerzas en pugna. Mientras que, los otros dos relatos más conocidos de las empresas de Federico I en Italia llegan, la del anónimo milanés que se supone fuese sire Raúl, hasta 1167, y la de Otón Morena de Lodi hasta 1168, esta tercera las precede en cierto modo y se detiene ante la narración de los acontecimientos de agosto de 1160, aun cuando se hable de Milán como de una ciudad que fue. Pero a diferencia de aquéllas, no se limita a los acontecimientos lombardos, sino que abraza horizontes más dilatados y sigue la trama de los acontecimientos en toda la Italia superior, ofreciéndonos una visión completa de la lucha de los municipios italianos contra el emperador suebo. La obra, muy curiosa desde muchos puntos de vista, nos ha sido conservada por los códices Vaticano Ottoboniano 1463 y Tribulciano 1436; basándose en el primero y más autorizado, Ernesto Monaci, en 1887, publicó la obra entre las «Fuentes para la Historia de Italia», editadas por el Instituto Histórico Italiano.
G. Franceschini