[L’homme du midi et l’homme du nord, ou l‘Influence du climat]. Obra del escritor suizo Charles-Victor de Bonstetten (1745-1832), publicada en 1824. De su experiencia de diplomático y. de viajero el autor extrae algunas consideraciones de orden general sobre la relación que existe entre el clima y las actividades humanas. Si bien ya Montesquieu formuló el principio de la influencia directa del clima sobre los hombres, es necesario, limitando esta afirmación, creer que la influencia es Verdaderamente prodigiosa: para el carácter de la naturaleza, los frutos de la agricultura y todo cuanto concierne a la vida civil. En varios capítulos, Bonstetten examina el género de vida del hombre meridional y del hombre nórdico: por ejemplo, el primero prefiere el campo y la naturaleza libre; el segundo,, la casa y el recogimiento. Por esto, a su vez, el meridional ama la pasionalidad en todas las cosas, el instinto, la música, la violencia en todo acto, hasta el valor ’entendido casi físicamente, y la venganza; el nórdico, en cambio, prefiere la meditación, la libertad política, aunque sancionada por las leyes, la reflexión, el hábito de fantasear, el interés por los problemas religiosos, el ahorro, por el carácter precario de la producción. Por esto en el Norte se ha desarrollado el comercio, el contacto entre los hombres, la lectura, las discusiones morales; allí es más vivo el sentido de la amistad y notable la fidelidad en el amor. Una diversidad sustancial consiste en la educación y en la civilidad, más lentas, pero más seguras en el Norte; más brillantes, pero más inclinadas a la facilidad y a la inconstancia, en el Sur. La obra, aunque aparentemente comprendida en la órbita de una Restauración ilustrada — y según puede verse en el capítulo final «Lo que hemos sido y lo que somos, o sea 1789 y 1824» — se inspira en las más provechosas exigencias políticas del siglo XIX.
C. Cordié