El Descontento, John Marston

[The Malcontent]. Drama en cinco actos de John Marston (15759-1634), publicado en Londres en 1604, cuyas fuentes se desconocen. Juan Altofronto, duque de Génova, arrojado del país por las intrigas de Pedro Jacomo, actual Duque, vuelve a su corte, de incógnito, bajo el nombre de Malévolo, «el Descontento». De palabra desenvuelta, sarcástico y casi feroz con todos, revela a Pedro Ja­como que su esposa, Aurelia, le traiciona con Mendoza, cortesano astuto y pérfido que recuerda al Yago (v.) del Otelo (v.). Pedro Jacomo finge que ha muerto; y, dis­frazado de romero, desenmascara a Men­doza, que es arrojado de la ciudad. Alto­fronto revela su personalidad. Pedro Ja­como, arrepentido y perdonado, perdona a su vez a Aurelia, y María, la fiel esposa de Altofronto, vuelve a ser duquesa de Gé­nova. El drama es rico en figuras secun­darias; entre ellas es notable la de Maquerelie, vieja alcahueta de la corte, y la de Bilioso, alto personaje cortesano, pomposo y necio. La vena de Marston, satírica y co­lérica, rebosa en este drama de motivos sarcásticos, que hacen del Descontento una obra original, llena de vigor y combativi­dad, con un estilo áspero y amargo. El héroe recuerda, aunque algo vagamente, al Hamlet (v.) de Shakespeare. Como Ham­let, Altofronto, fingiéndose loco, dice a to­dos la verdad. El cinismo del protagonista es probablemente el del mismo autor, co­nocido como polemista y siempre dispuesto a luchas literarias y polémicas.

A. Camerino

El mejor drama de Marston… la ira que le incuba, la resignación llena de resenti­miento, el impaciente espíritu de la tole­rancia, la amarga pasión del desdén, que animan las palabras y guían la acción del héroe, están sentidas dramáticamente. (Swinburne)

El mérito del Descontento reside más bien en estar inmune de los más groseros defectos que pueden esperarse de Marston, además de cierta abundancia de méritos positivos, cuando lo comparamos, no con Shakespeare, sino con sus contemporáneos. (T. S. Eliot)