[Go down, Moses]. Conjunto de narraciones del gran novelista norteamericano William Faulkner (n. en 1897) publicado en 1942. Componen el libro siete novelas breves de contenido y extensión muy variable que tienen, sin embargo, una unidad temática, pues constituyen una epopeya de los negros del Sur. Faulkner trata de nuevo un problema, el de la raza negra, que había sido ya el tema de Luz de Agosto (v.) y que será también el núcleo dramático de ¡Absalón, Absalón! Pero esta vez el problema no está visto desde el ángulo exclusivo del odio y del resentimiento acumulados en el alma negra, sino más bien — como advierte un autorizado crítico — «el lento e inexorable proceso de violencia e injusticia, de tolerancia y amor que había permitido la fusión y la convivencia de las dos razas y que había dado origen a la turbia mezcla de sangres en que se asentaba la complejidad espiritual y la grandeza humana del Sur». Faulkner, el aristócrata secular del Sur, rinde un tributo a la raza heroica y por este motivo dedica el libro a una negra del Mississipí, a Mammy Caroline Barr, «que nació en la esclavitud y profesó a mi familia una fidelidad desinteresada y sin límites, y a mi niñez una inmensa veneración y amor». Las narraciones del libro se refieren a la genealogía de la familia McCaslin, familia del condado de Yoknapatawpha, pero los protagonistas son en realidad los negros emparentados con ellos.
Así, el mulato Lucas Beauchamp, que pega a un hombre blanco en el relato «El fuego y el hogar»; Sam Fattyhers, negro de sangre india, protagonista del relato «El oso», etc. Por las venas de Lucas Beauchamp corre la sangre blanca de los McCaslin — de los que es el postrer descendiente por línea de varón — y la sangre negra de los antiguos esclavos. Su enfrentamiento en el relato con la figura del tío Ike McCaslin, nos muestra su complejidad espiritual. Esta figura pasará a ser la protagonista de Intruso en el polvo (v.). Otro personaje, Sam Fattyhers, es el protagonista de dos relatos, «Gente de antes» y «El oso». La complejidad racial de Sam es todavía más honda, pues es hijo de un antiguo jefe indio Chickasaw y de una esclava negra. «El oso» es una visión del misterio de las selvas del Mississipí por el pequeño McCaslin, a quien Sam acompaña en sus primeras aventuras de cazador. La obra toda es un canto a la grandeza del Sur, a la hermandad de sangre entre blancos y negros más allá del resentimiento racial que constituirá el tema de otras novelas suyas a partir de Intruso en el polvo. El título del libro procede significativamente de un spiritual.
…esta obra magistral y bellísima, que posee el aliento misterioso y entrañable de los «spirituals songs» del Mississipí, es la más honda interpretación del alma negra. (Vilanova)