[The Simple Cobbler of Aggawam]. Breve obra del norteamericano Nathaniel Ward (1578-1652), escrita cumplidos ya sus setenta años, publicada en 1647. Es sobre todo significativa por los principios de filosofía política que contiene y que son los de un abogado que se hizo sacerdote calvinista y puritano.
Él sostiene, aparte. ciertos puntos de economía política (reformas necesarias en aquel tiempo y que ahora tienen muy poco interés para un lector que no sea historiador), la necesidad de una Constitución escrita; y afirma que la justicia de Dios quitará a los estados no menos que a los individuos lo mal adquirido. Ward se interesa por obtener un justo equilibrio entre los intereses y lograr que todos reflexionen acerca de sus responsabilidades ante los hombres y, más aún, ante Dios. «La autoridad ha de poder hacer honrado al pueblo, y así debe poder conservarlo». Ward declara que él no es un presbiteriano que tenga maneras de ver personales. Esta breve obra fue calificada de «libro extraño», más que nada por el estilo, entre verboso y profético, del anciano sacerdote; el cual conocía a los escritores ingleses contemporáneos suyos y modeló en ellos su lenguaje abundante, férvido y casi conmovedor por su tono de compungida persuasión.
A. Camerino