[Sonnets pour Héléne]. Compuestos por Pierre de Ronsard (1524-1585) en honor de Héléne de Fonséque, hija del barón de Surgéres, dama de honor de Catalina de Médicis, y publicados en 1578, en una nueva edición de sus Obras. Hay quien dice que fue la reina, admirada por la excepcional belleza de la jovencita, quien invitó a Ronsard para que la eternizara en sus versos. La suya, por tanto, fue una pasión completamente poética, a lo que contribuyó la reserva de la mujer. Novela de amor que seguramente terminó en 1575, cuando Elena, al morir su prometido, renunció al matrimonio para acabar sus días en un convento. Los Sonetos, que empiezan con el celebrado «Ce premier jour de may, Héléne, je vous jure», tienen acentos verdaderamente delicados, de una ternura suave y esquiva, de una melancolía adecuada a este otoñal amor del poeta, aunque matizados con aquel preciosismo sacado del petrarquismo italiano, especialmente por obra de Philippe Desportes en sus Primeras Obras (v.), publicadas en 1573. Pero ello, no disminuye la personalidad del artista, que se matiza con la inevitable melancolía de su tardío amor.
C. Cordié
Es un poeta, mejor dicho un grande, un grandísimo poeta. (Lanson)