Estudiada en su génesis e interpretada [Die gottliche Komodie. Entwickelungsgeschichte und ErkIcirung], Obra crítica de Karl Vossler (1872- 1949), publicada en Heidelberg en 1907- 1910 y en segunda edición en 1927. Más que una reconstrucción histórica en sentido estricto es un examen de la Divina Comedia que ofrece a los investigadores la posibilidad de ampliar el interés crítico con el que se examinaba esa obra maestra, sea mostrando sus profundos contactos con la cultura clásica y medieval, sea considerando — desde fuera del «dantismo» y de la erudición con finalidad en sí misma— el particular acento poético de la obra, a menudo valorada por los lectores extranjeros como un documento que hay que celebrar, si no gustar en sus íntimos elementos.
Vossler, que advierte que su trabajo se compone de partes en cierta manera independientes entre ellas, empieza por mostrar la «Historia del desarrollo religioso- filosófico» del poema, alegando la importancia del Fausto (v.) de Goethe con el fin de indicarlo como un libro, que, como la obra maestra de Dante, canta la caída y la purificación del hombre y en el cual han puesto mano «cielo y tierra». La Divina Comedia no puede ser entendida sólo como obra de fantasía, y por ello debe ser conocido adecuadamente el mundo cultural del que quiere ser expresión; en ella confluyen motivos de la espiritualidad humana, que desde los tiempos antiguos hasta los de la era cristiana muestran aspiraciones profundas en la creencia en otra vida y en el destino del alma. En particular Vossler ilustra con numerosas citas de textos la doctrina de la Iglesia en relación con la creencia en el más allá, y el difundirse de las varias comentes filosóficas y teológicas, frecuentemente en lucha entre sí, sobre todo el misticismo y el intelectualismo. En la escolástica y después en Dante los diferentes problemas son vivificados por un interés profundo por el magisterio de las almas y de la redención cristiana.
Vossler, aun extendiéndose al hablar de los diferentes movimientos religiosos y culturales de la Edad Media, pone en evidencia cómo por su personalidad de pensador y de artista, Dante no podía encajar su pensamiento ni entre los averroístas, ni entre los tomistas, ni completamente entre los místicos, aun cuando su visión pareciera más afín a la concepción de estos últimos. El investigador pasa de aquí a estudiar en la «Historia del desarrollo ético-político» de la Divina Comedia la relación del punto de vista ético con el político, y después la concepción del estado en los principios del cristianismo y en la época de Dante. Al fin de su largo trabajo consigue sistematizar la personalidad de Dante, hombre de partido y artista, en la cultura de su tiempo, entre las necesidades políticas de la lucha entre el Imperio y la Iglesia y las aspiraciones religiosas de una renovación del mundo, lo que el crítico llama «la ruina de la Edad Media». Dante construye su mundo y consolida su personalidad al crear la alegoría ético-política de su obra principal. En esta parte de la monografía son examinados con particular atención las relaciones entre el misticismo y el racionalismo tanto en los tiempos de Dante como en la realización artística del poema.
Un segundo volumen (dividido en dos partes como el primero) estudia «La génesis literaria de la Divina Comedia valorando su importancia en la historia de la literatura». La obra es estudiada en la precisa confluencia de los diferentes motivos de la formación literaria artística y espiritual de Dante desde la cultura latina, sacra y profana de la Edad Media, hasta el influjo de la poesía provenzal y de la prosa y poesía didascálica francesa y hasta los orígenes de la lengua y de la literatura italiana. Con especial interés estudia la poesía alegórica y apocalíptica en la que la Divina Comedia encontró su posición histórica, realizando en una obra de indiscutible valor aquella ferviente esperanza de la civilización florentina desde finales del siglo XIII y en particular del grupo de los «stilnovistas».
C. Cordié