[Commentum ad Vergilium]. Obra de Elio Donato (siglo IV) que comprendía el comentario a las Bucólicas (v.), Geórgicas (v.) y Eneida (v.), y de la que sólo nos han llegado algunos fragmentos: la dedicatoria a Munacio, la «Vida de Virgilio», la introducción a las Bucólicas y algunos extractos bajo el título de Escolios Danielinos [Scholia Danielina], así llamados por haber sido publicados por Pierre Daniel. Bastan, sin embargo, estos pocos fragmentos para dejarnos entrever la vasta cultura de Donato, el cual, iniciando la tradición exegética de la Edad Media, demuestra el prolongado estudio y el grande amor que el autor ha dedicado a la obra de Virgilio. El poeta, que aparece ya idealizado en la vida, se convierte en el comentario en un maestro de estilo; su obra es elevada a paradigma; la misma evolución poética, de las églogas de los años juveniles a la épica de la edad madura, aparece encubierta en un necesario y gradual progreso de la sociedad humana desde el estado casi salvaje de los pastores al ya más culto de los agricultores y de este último al más civilizado de los héroes troyano-romanos. Con Elio Donato ha sido a menudo erróneamente confundido otro comentarista virgiliano, Tiberio Claudio Donato (siglo IV después de Cristo), un maestro de retórica que reconoció en la Eneida un verdadero y auténtico repertorio de enseñanzas retóricas. Pero, aun persiguiendo ideales a su manera estéticos, no olvida las referencias histórico- arqueológicas y jurídicas.
F. Della Corte