Tomás Luis de Victoria (o Vitoria)

Nació en torno al 1548 en Ávila o en las cer­canías de tal ciudad y murió el 27 de agosto de 1611 en el convento madrileño de las Descalzas Reales. Se le considera el prin­cipal representante de la escuela polifónica española clásica. Puede comparársele a Palestrina (v.) en profundidad de inspiración religiosa, aun cuando resulta menos vasto y universal. Cultivó exclusivamente los gé­neros sacros, y poseyó características pro­pias de oscuro dramatismo, que se dieron igualmente en su gran antecesor Morales y eran adecuadas al sentimiento católico de España. Estudió probablemente con Escobedo en Segovia; en 1565, obtenida la ayuda económica de Felipe II, dirigióse a Roma, donde ingresó como cantor en el Collegium Germanicum, fundado por Ignacio de Loyola, y debió de ser alumno de Palestrina.

En 1572 publicó en Venecia la primera co­lección de composiciones, integrado por gran parte de sus Motetes (v.) Al año siguiente fue nombrado maestro de capilla del mencio­nado colegio, y escribió, con tal motivo, un Super flumina para doble coro y órgano. Desempeñó también este mismo cargo y el de organista en la iglesia de Santa María de Montserrat, de la Ciudad Eterna. En 1575 recibió las órdenes sagradas y en 1576 pu­blicó el Liber primus, qui Missas, Psalmos, Magníficat, ad Virgínem Dei Matrem Salutationes aliaque complectitur. Abandonado el Collegium Germanicum (1578), ejerció el sacerdocio en el templo de San Jerónimo de la Caridad, al cual se hallaba anexo el Ora­torio de San Felipe Neri. Figuró, además, en el séquito del príncipe de Altemps. En 1581 dio a la luz, en Roma, una colección de Magníficat y Antífonas y otro de Hymni totius anni secundum S. R. E. consuetudinem quatuor vocum, una cum quatuor Psalmis pro praecipuis festivitatibus octo vocibus, y en 1583 un libro de Motetes y Salmos, y uno de Misas (v.) a cuatro voces.

A pe­sar del aprecio y la fama de que dis­frutaba en el ambiente romano, quiso re­gresar a la patria; y así, luego de haberse hecho admitir en el séquito de la empe­ratriz viuda María, hermana de Felipe II, llegó hacia 1584 a Madrid, donde la sobe­rana ingresó en el convento de las Descalzas Reales. Mientras tanto (1585) eran publi­cadas en Roma sus colecciones Motecta festorum totius anni cum communi sanctorum, a cinco, seis y ocho voces, y Officium heb- domadae sanctae. Vinculado también al ci­tado convento, permaneció en él hasta su muerte, y desempeñó allí las funciones de sacerdote, organista y maestro de capilla.

Al mismo tiempo, dedicóse a la composi­ción de varias oleras: los libros de Cantiones sacrae, de cuatro a doce voces; el con­junto Missae, Magníficat, Motecta, Psalmi, et alia quae plurima, Quae partim octonis, alia nonis, alia duodenis vocibus concinuntur (1600), y la misa de difuntos a seis voces titulada Officium mortuorum (1605).

F. Fano