Nació el 2 de julio de 1857, en Frascati (Roma), de madre inglesa, y de Diomede Pantaleoni, médico y escritor político, que tomó parte activa en el movimiento de unificación italiano, y murió en Milán el 29 de octubre de 1924. Profesor universitario a los 25 años, enseñó Economía política en Venecia, en la Universidad de Ginebra y desde 1901 hasta su muerte en la de Roma. En 1889 publicó la primera edición de Principios de economía pura (v.), obra destinada a convertirse en clásica de la literatura económica italiana. En 1895 publicó el Giornale degli economisti, una monografía intitulada La caduta della Società generale di credito mobiliare italiano, obra que revela mejor que ninguna otra las cualidades que le distinguen: vivo interés por los problemas de la vida práctica y extraordinaria capacidad para interpretar los hechos concretos a la luz de las teorías elaboradas por la ciencia.
Hombre de gran talento, dotado de prodigiosa memoria y de una vasta cultura humanística y científica, Pantaleoni fue un verdadero maestro con sus trabajos de economía y con su enseñanza desde la cátedra. Quiso ser también hombre de negocios y político; pero sólo cosechó amarguras y desilusiones en estos aspectos de su actividad. Al estallar la primera Guerra Mundial, se mostró favorable a la intervención, y después de la victoria sostuvo la tesis del nacionalismo más exagerado; durante breve tiempo estuvo también en Fiume como rector de la hacienda de D’Annunzio. Pantaleoni aprobó incondicionalmente los medios de lucha del fascismo contra el «bolchevismo», y cuando Mussolini subió al poder le prestó todo su apoyo, en la confianza (más tarde mal correspondida) de que podría reducir al mínimo la intervención del Estado en la vida económica, acabando rápidamente con las estructuras monopolizadoras parasitarias que ahogaban la economía italiana. Son dignos de mención sus Erotemas de economía (1925, v.).
E. Rossi