Autor dramático chino que vivió en los últimos tiempos de los Chin (1115-1234) y en los inicios de la dinastía Yuan (1279-1368). Como ocurre con tantos otros dramaturgos compatriotas suyos, casi nada conocemos acerca de su existencia; sabemos, empero, que compuso numerosos dramas. Wieger habla de sesenta obras, de las cuales han llegado hasta nosotros únicamente trece, entre las que destacan de una manera particular las tituladas Tou Ê Yüan (v.) y Chiu Fêng Ch’ên. El análisis de estas dos piezas revela claramente a un gran escritor, que nos da una imagen de toda la vida y las ideas contemporáneas.
El primero de ambos textos ensalza la casta viudez de una mujer injustamente acusada y muerta; ello vincula al autor a las tradiciones literarias más antiguas y genuinas de su país. La segunda obra, una comedia, ofrece otro aspecto de su espíritu al presentar, con mucho ingenio, a una astuta cortesana que logra librar de los lazos matrimoniales a una pobre amiga suya destinada a una boda infeliz. Tales producciones pertenecen al «teatro del Norte», adaptado a los rudos gustos de la población septentrional, entre la que naciera nuestro autor. Más tarde, con los Ming, aparecería el «teatro del Sur», donde se da una mayor afinidad al temperamento meridional chino, más animado, variado y alegre (v. Kao Tsê- Ch’êng).
G. Bertuccioli