Ch’ên Shou

(Apelativo honorífico, Ch’ êng Tsu). Nació en An-han (Ssûchuan) en 233 y murió en 297. Fue un historiador chino que vivió durante el período política y militar­mente tan confuso de los «Tres Reinos» (San Kuo, 221-265); los últimos treinta años de su existencia transcurrieron bajo el gobier­no nuevamente unificado de los Chin occi­dentales (265-316), quienes tenían su capital primero en Ch’ang-an (Shensi) y luego en Lo-yang (Honan).

Intensamente inclinado al estudio ya desde su infancia, tuvo por maes­tro a Chiao Cliu (200-270). Acabada su for­mación, sirve como funcionario de la peque­ña dinastía Shu-Han, soberano de uno de los «Tres Reinos» mencionados, situado en su provincia natal, y durante el desempeño de su cargo tuvo el valor de oponerse al pode­roso eunuco Huang Hao. Elegido censor, se retira, no obstante, a la muerte de su ma­dre, en parte debido a las molestias que le ocasionaba su rival Hsün Hsü (m. 289); re­chazó incluso el cargo de preceptor del prín­cipe heredero.

Su nombre se halla vincu­lado a la historia por la compilación de la famosa obra San Kuo Chi (v.) o Historia de los Tres Reinos, muy admirada y fuente de la popularísima novela San Kuo Chi Yen I, escrita bajo la dinastía Yuan (1260-1368). Fue también autor de las Biografías de los antiguos hombres beneméritos de Ssûchuan [I Tu Ch’i Chiu Chuan] y de una Historia de los Antiguos Reinos [Ku Kuo Chih].

El período en cuyo transcurso vivió Ch. re­sultó escaso en producciones literarias de gran fama y amplios alcances, ya que China se hallaba demasiado agitada por las luchas intestinas de los diversos reinos que se dis­putaban el dominio de todo el país.

Por lo tanto, es digno de admiración el hecho de que nuestro autor, aprovechando la relativa calma lograda por la nueva dinastía Chin en los últimos años de su vida, llegara a componer una obra abundante en acontecimientos y datos; este mérito no se ve empañado por las lagunas del texto, que en 429 habría de llenar P’ei Sung-chih (372- 451), padre del célebre P’ei Yin, comenta­dor de Ssû-ma Ch’ien.

B. Fedele