Nació el 10 de enero de 1874 en La Bruyère (Haute-Saône) y murió el 26 de febrero, de 1932 en París. Estudió en el Liceo de Vesoul, y fue admitido luego en la École Normale. Al principio enseñó en las provincias, y posteriormente, ya doctor en Letras, actuó como profesor universitario en Besançon, Dijon y, finalmente, en la Sorbona (1929). Sus asiduas y apasionadas investigaciones dedicadas a la Revolución francesa se aplicaron singularmente a los aspectos de ésta, interesantes para la actualidad contemporánea: la cuestión religiosa en la época de las leyes referentes a la separación entre la Iglesia y el Estado (La théophilantropie et le culte décadaire, tesis de 1904, y más tarde Rome et le clergé sous la Constituante, 1911), y la económica y social, que le sugirieron particularmente las luchas de los obreros y la admiración hacia Jean Jaurès.
Alejándose de la escuela de Aulard, Mather desacreditó la leyenda heroica republicana, puso de relieve el radical influjo de los intereses económicos, sociales e individuales, planteó de nuevo el problema del conflcto entre girondinos y jacobinos y revalidó la conducta política y moral de Robespierre frente a Danton. Esta orientación influyó a su vez en los tomos sucesivos de la Historia socialista 1789-1900 (v.) del mismo Jaurès, que Mather volvió a editar. Dicha tendencia, además, informó los numerosos ensayos aparecidos en la Revue historique y en la revista fundada por nuestro autor en 1909, Annales révolutionnaires, continuada en Annales historiques de la dévolution française a partir de 1924, año en el cual Mather fundó también la «Société des Études Robespierristes»; el más importante y fundamental de estos ensayos fue el titulado La vie chère et le mouvement social sous la Terreur (1927). La Guerra Mundial, finalmente, llevó la atención del autor hacia la política exterior de los gobiernos revolucionarios, inspirada en las exigencias nacionales contrarias al proclamado cosmopolitismo (La Révolution et les étrangers, 1918).
Por aquel entonces aparecieron los tomos de La Revolución francesa (1922- 1927, v.). La réaction thermidorienne (1929) tendría una continuación en El Directorio (1934, v.), obra póstuma redactada por J. Godechot sobre la base de los apuntes dejados por Mather, su maestro, a quien la muerte sorprendió inesperadamente todavía en la plenitud de una actividad que unió al rigor científico la viveza polémica y la animación de una fe.
P. Onnis