Libros de sangre 1 y 2 (Clive Barker)

 

Cójase un puñado de buenas ideas y añádase un estilo impecable, un ritmo narrativo bien mantenido, un punto de vista original, una generosa dosis de gore y una pizca de humor. El resultado de este cóctel son los históricos Libros de sangre, de Clive Barker, sin duda una de las mejores antologías de terror de todos los tiempos.

La Factoría de Ideas acaba de reunir en dos volúmenes los 16 cuentos que Barker publicó en 1984 en tres tomos (y que ya habían sido editados anteriormente en España, también en tres volúmenes, de la mano de Planeta y bajo el título de Libros sangrientos), aunque la antología completa está compuesta por otros tres libros más (que fueron recopilados por Martínez Roca bajo los títulos de Sangre y Sangre 2). A más de uno le rechinarán algunas diferencias entre las traducciones de ambas editoriales, especialmente en los títulos (por ejemplo, “El tren de la carne de la medianoche” se convierte en “El tren nocturno de carne”, y “Rex, el hombre lobo” en “Rex Cabezacruda”), pero esta última edición, la de La Factoría, es correcta y, afortunadamente mucho menos pródiga en erratas (y errores de traducción) que otros títulos publicados por el mismo sello.

Una de las claves que hacen de los Libros de sangre una antología redonda —y que la diferencian de tantos otros volúmenes de cuentos— es el elevado nivel de todos sus relatos: entre ellos no hay ni uno solo que sea de relleno y sí, en cambio, unos cuantos que se quedan clavados en la memoria y pueden calificarse de auténticas obras maestras. Es el caso, por ejemplo, del excelente “Terror”, que narra la fascinación de un individuo por el miedo y sus poco ortodoxos «experimentos» para investigar las reacciones de sus cobayas humanas cuando las obliga a enfrentarse con sus terrores más profundos. O el caso de “En las colinas, las ciudades”, en el que una única imagen (la de miles de personas engarzadas las unas con las otras para formar un enorme gigante) bastaría para justificar por sí sola todo el relato. O “Confesiones del sudario (de un pornógrafo)”, la historia de una venganza cuyo protagonista es un fantasma casi a la vieja usanza, ensabanado y todo. O (cambiando de registro, ya que este relato se inscribe más en el género del terror humorístico que en el de terror puro y duro) el divertidísimo “El Charlatán y Jack”, que narra las vicisitudes de un diablo a quien se le encomienda una ardua tarea: atormentar a un humano demasiado apático como para ser amedrentado por nadie.

Aunque la heterogeneidad es precisamente una de las virtudes de esta antología (pese a su preferencia por el terror más descarnado, Barker también echa mano frecuentemente de la ironía y es capaz de utilizar la sutileza y las insinuaciones como arma para inquietar al lector), sí hay una serie de pautas que subyacen bajo todos los relatos y que le dan unidad al volumen (sin contar, por supuesto, con el detalle de que todos ellos fueron escritos desde el mas allá arañando las palabras sobre la piel de un joven, pero ésa ya es otra cuestión). Por ejemplo, la absoluta falta de piedad que muestra hacia sus personajes (y, de rebote, hacia el lector) y la ausencia total de moralina y maniqueísmo: a menudo las víctimas se convierten en verdugos, o los buenos acaban abrazando la causa de los villanos, o el lector acaba comprendiendo el punto de vista del monstruo, y hasta simpatizando con él. Pero, sin lugar a dudas, la principal seña de identidad de Clive Barker, lo que hace de los Libros de sangre la monumental obra maestra que son, es la abundancia de regocijantes descripciones sangrientas, muy sangrientas. ¿Cómo olvidar frases tan brutales como «La criatura lo había agarrado del labio para arrancar el músculo del hueso como si estuviera quitándole un pasamontañas»? Y esto es sólo por poner un ejemplo…

Adolfina García

Viaje a la historia de la publicidad gráfica. Arte y nostalgia

FICHA DEL LIBRO
ENLACE AL LIBRO: CONVERTIR ESTE LIBRO «
TÍTULO=»Libros de sangre 1 y 2 (Clive Barker)»
ENLACE DE DESCARGA:
ENLACE DE DESCARGA (En el banner vertical)
REFERENCIA Y AUTOR: «Libros de sangre 1 y 2 (Clive Barker)»

PDF


FORMATOS DISPONIBLES: EPUB,FB2,MOBI

Médula (Robert Reed)

Médula es otro de esos libros terriblemente aburridos con los que la ciencia-ficción contemporánea nos castiga una y otra vez a quienes nos empeñamos en amar a este género, casi siempre a causa de las satisfacciones que nos dio en las décadas pasadas. Cómo este tipo de larguísimas y soporíferas naderías consiguen prosperar entre el mismo público que defiende el valor como escapismo de este tipo de literatura es una incongruencia verdaderamente misteriosa para mí.

La verdad es que casi todo alrededor de Médula tenía mala pinta. Es de un autor que es publicado por primera vez en castellano por La Factoría, lo que si nos atenemos meramente a precedentes estadísticos, ofrecía más o menos un ochenta por ciento de posibilidades de que el libro resultara ser un rollo. Va de objetos grandes, de ésos que van por el espacio y ocasionalmente chocan, y hace que la cf de objetos grandes que chocan no me da ninguna alegría desde la última novela de la Cultura de Iain Banks, sin que exista otro referente de interés en este muy especializado subgénero precisamente desde la anterior novela de la Cultura de Iain Banks. Sin embargo, había dos razones que me impulsaron a la lectura: una, que los relatos de Robert Reed a los que he tenido acceso están claramente por encima de la media, con una atractiva combinación entre temáticas de cf estrictas y un manejo correcto de los recursos literarios. Otra, que el libro había resultado finalista en el Hugo, lo que no es mucho decir, pero suele ser un dato de interés en ciertas circunstancias. Por ejemplo, cuando la obra finalista corresponde a un autor que no forma parte de la lista de los obvios, y que por tanto sólo puede haber llamado la atención de los votantes por su calidad.

Pero Médula realmente destroza las expectativas a una velocidad superior a la de la luz. En el prólogo -¿qué sería de una novela actual de cf sin un prólogo misterioso, preferiblemente impreso todo él en una cursiva que nos haga sentir incómodos en la lectura?- se nos informa de que la acción se va a desarrollar en el interior de una gigantesca nave espacial, de origen desconocido, de cinco mil millones de años de antigüedad y grande realmente más allá de la imaginación. Los terrestres la encuentran, la conquistan, y la dan exactamente el tipo de uso que cualquiera podría haber imaginado (o no): la convierten en lugar para hacer cruceros interestelares, a las órdenes de una jerarquía de inmortales que, realmente, no aprenden nada sobre la vida a lo largo de su prolongada existencia.

Así que la novela se plantea como una especie de Cita con Rama a lo bestia, aunque lo malo es que su desenlace también recuerda al de otra obra de Arthur C. Clarke -que no revelaré, por si acaso alguien se siente motivado a leer el libo después de todo, aunque sí avanzo que es un final bastante más idiota que la propia novela en general, que simplemente es poca cosa-. Eso sí, un Cita con Rama actualizada para los tiempos que corren, con personajes femeninos dominantes y liberados que se cepillan a extraterrestres pajarunos y ese tipo de cosas.

En su discurrir hacia desvelarnos los secretos que se esconden en el interior de la supernave, así como los conflictos que se establecen entre los diferentes extraterrestres -conseguidamente raros, en algunos casos-, lo que me resulta más molesto como lector es el ocasional tono pseudo poético que alguien ha intentado introducir en la historia, no sé si el autor o la traductora con su extraña afición a la construcción de las frases en órdenes no convencionales sintácticamente. Una elección de registro verdaderamente extraña, y que desde luego no ha conseguido resultado alguno. Comparar los momentos en los que Reed se pone importante con relatos de Bradbury, o con los cuentos en los que Heinlein estaba inspirado por esa vía, produciría auténtico sonrojo.

En fin, nada de nada, una vez más. Sólo espero que entre todos se consiga hacer una criba de las decenas de novelas de autores poco conocidos publicadas por La Factoría en los últimos años, y que parecen no haber tenido impacto alguno en la crítica. Me gustaría saber cuáles de ellas realmente merecen el dinero que cuestan. Seguro que debe haber algunas, pero personalmente me siento abrumado por su número -y precio-, además de que parece que he tenido la mala suerte de topar siempre con algunas de las que no valen la pena.

Julián Díez

www.biblipolis.org

Viaje a la historia de la publicidad gráfica. Arte y nostalgia

FICHA DEL LIBRO
ENLACE AL LIBRO: CONVERTIR ESTE LIBRO «
TÍTULO=»Médula (Robert Reed)»
ENLACE DE DESCARGA:
ENLACE DE DESCARGA (En el banner vertical)
REFERENCIA Y AUTOR: «Médula (Robert Reed)»

PDF


FORMATOS DISPONIBLES: EPUB,FB2,MOBI