En un pueblo de veraneo se vio por última vez a una adolescente que desapareció de su colegio sin previo aviso. Era la hija de un magnate que había hecho su fortuna gracias a la corrupción y la intimidación. ¿Ha desaparecido de forma voluntaria? ¿Se trata de un secuestro? ¿Un asesinato?.

Comentario:

Somoza parte de un punto interesante para construir una historia que no acaba de cuajar.
La evolución de la novela se va enredando de tal forma que se hace confusa, ahondando en detalles que no parecen venir a cuento, ocultando información que uno de los personajes conoce hasta que le parece que es el momento de dar la sorpresa, unas cincuenta páginas o más después, algo que personalmente me molesta mucho por parecerme un recurso demasiado visto y propio de autores con menos talento
.
No sé si se debe a que he tenido que terminarla con cierta rapidez, pero mi impresión es que Somoza no se entrega tanto como en sus mejores obras, que no despliega todo el potencial de la novela.
Hay apuntes de sus temas habituales, como la literatura en la literatura, el cine, el concepto de realidad y ficción, pero de alguna manera están sólo esbozados, pasa de largo sobre tramas potencialmente interesantes.

Sólo en algunos párrafos, reflexiones de los personajes e ideas apenas esbozadas parece despertar el Somoza que me gusta, el que lleva su imaginación hasta las últimas consecuencias.
El resto es una novela que paree deliberadamente vaga en su desarrollo y conclusión sin darnos las pistas necesarias para que cada persona interprete lo que ha sucedido o no.
Una novela menor de un buen escritor, que entretiene solo a ratos y que, al contrario que sus mejores novelas, se olvida en cuanto se termina la lectura.