Tres Mil Epigramas Alemanes, Friedrich von Logau

[Deutsche Sinn-Gedichte drei Tausend]. Los Epigramas de Friedrich von Logau (1605- 1655), publicados en Breslau en 1654, cons­tituyen, más que una gran obra literaria, un interesante documento humano y un precioso testimonio para comprender las condiciones éticas y sociales del mundo ale­mán durante la Guerra de los treinta años.

En un principio fueron publicados por sepa­rado y, más tarde, fueron reunidos en volu­men por el autor, en número de tres mil, bajo el pseudónimo de Salomon von Golaw. Largo tiempo permanecieron en el olvido, hasta que los redescubrió un conocido ensa­yo crítico de Lessing en 1759, y más tarde (1872) los reimprimió y publicó G. Eitner, que recogió en conjunto 3.353. Representan una especie de «diario de su vida nocturna», el desahogo de todos los días de un espíritu profundamente religioso y honrado, para aliviar los sufrimientos que le imponía su profesión jurídica y más todavía el contacto con la corrupción y la estulticia de la hu­manidad. Sin embargo, dice el melancólico pesimista, «cuando no haya estulticia se acabará la humanidad», y su sátira o su crítica se mantienen patéticamente auste­ras, sin convertirse casi nunca en ásperas y corrosivas.

La capacidad formal de este literato silesiano es muy modesta; sin embargo, su crónica autobiográfica, lleva­da a través de breves epigramas, donde predominan las notas de un intenso amor hacia su patria extraviada, discorde y co­rrompida, de una resignada nostalgia de paz doméstica y mística elevación, tiene un valor que trasciende el meramente lite­rario. «La esperanza es un sólido bordón y la paciencia un traje de viaje con que, pasando por el mundo y la tumba, se llega a la eternidad», dice uno de sus tranquilos epigramas, y otro observa: «Cada cual en este mundo elige como bien supremo lo que más le gusta. Es afortunado quien prefiere una de estas cuatro cosas: un, Dios benig­no, una buena mujer, un cuerpo sano y una muerte serena».

L. Mazzucchetti