[Typhis batavus, sive histiodromica de navium cursibisus et re navali]. Obra del matemático holandés Willibrord Snell van Roijen, en latín Snellius (1581 ó 1591-1613), publicada en Batavia en 1624.
Es un manual de navegación y pudiera traducirse por el «Argonauta bátavo». Se divide en dos libros ornados con ciento tres figuras, con un prefacio y sesenta páginas de Tabulae Canonicae Parallelorum. En el primero demuestra las enunciaciones principales referentes a la loxodromia y consta de 34 proposiciones; el segundo libro da ejemplos prácticos para la aplicación de la loxodromia a la navegación y consta de quince proposiciones, de tablas numéricas y de la tabla de un curso compuesto para un navío. El primer libro interpreta la propiedad de la línea trazada por el curso de la nave, según la indicación de la aguja magnética, en uno de los treinta y dos «rumbos» comprendidos en la rosa de los vientos. Esta línea, llamada loxodromia, sigue un paralelo si la ruta de la nave es hacia el oeste o el este (el acimut vale 90°) y sigue un meridiano si va hacia el sur o el norte (el acimut vale 0o).
En todos los demás rumbos de navegación la línea es una curva que, cortando a los meridianos siempre bajo un ángulo constante, asume la forma de una espiral que no tiene polo, de modo que podemos decir que sus anillos son asintóticos al polo. Para la demostración de la prop. XVII, «La loxodromia es como la base de un triángulo rectángulo aplicado a la superficie de la esfera y del cual un lado es la distancia de los paralelos entre los cuales está comprendida», recurre a un argumento en el que, en forma bastante explicada, interviene el concepto de lo infinitesimal. «Sólo en partes pequeñísimas — dice — la loxodromia y los meridianos pueden coincidir» y añade que «si bien ninguna parte, por pequeña que sea, de la curva es recta, sin embargo para los sentidos la diferencia es despreciable»; por lo tanto este mínimo segmento de loxodromia así concebida se convertirá en base del ángulo recto y el otro cateto en segmento del meridiano. Ciertamente hubiese sido más exacto que hubiese dicho: el segmento de loxodromia se convierte en fracción dependiente de los dos catetos, pero no puede pretenderse tanto y, aunque expresada con pura exactitud, la introducción de lo infinitesimal es evidente.
De la prop. XIX, «Dado el tamaño y el ángulo de inclinación de la loxodromia, encontrar la distancia de los paralelos», y de las sucesivas derivan las «variaciones» de latitud y longitud, problemas que encuentran sus correspondencias en el problema moderno de las latitudes crecientes. En el segundo libro de aplicación al curso de una nave, distingue entre curso sencillo, que iniciado bajo un determinado «rumbo» lo mantiene, y curso compuesto, el efectuado con la variación de rumbos, o sea pasando de una loxodromia a otra. Es sabido que el tratado de Snellius no tiene mucha importancia práctica para la navegación, pero es importante por el espíritu matemático que guió al autor, quien, en su corta vida, dio pruebas luminosas de su genio matemático, tanto con las leyes de la refracción como con la aplicación de un método para la medida trigonométrica de un arco de meridiano y, en fin, por la amplia contribución al desarrollo de la trigonometría y a los principios teóricos de la triangulación (v. Eratóstenes Bátavo).
P. Pagnini