Célebre obra del militar español Bernardino de Mendoza (1540-1604), escrita en una celda del monasterio español de San Bernardo, donde se retiró el autor después de sus múltiples estancias y campañas en Italia y Flandes. Dedicada al príncipe heredero don Felipe (futuro Felipe III), es una obra muy meditada, breve y escrita con gran galanura de estilo.
Consta de unas consideraciones y estudios preliminares sobre la guerra ofensiva y defensiva, de las cualidades que deben reunir los jefes y los soldados, de los medios de que deben disponer las tropas que van a entrar en campaña, del establecimiento y organización de los campamentos, de los ataques por sorpresa y de los principios básicos de la táctica y de la estrategia, de la jerarquía militar, ataque y defensa de las plazas fuertes, cualidades que debe reunir el gobernador de las mismas, escaladas y levantamiento de sitios, batallas, empleo corriente de la artillería y de la caballería en ellas, y de los principios fundamentales de los combates por mar. La obra resume las múltiples experiencias del autor, que figuró en un lugar destacado entre la brillante constelación de jefes militares de la época de Felipe II.
J. Reglá