Los Virginianos, William Makepeace Thackeray

[The Virginians]. Novela de William Makepeace Thackeray (1811-1863), publicada por entregas desde noviembre de 1857 a octubre de 1859, y reco­gida en volumen en 1858-59. Esta novela puede considerarse la continuación de la Historia de Enrique Esmond (v.), ya que en ella el autor cuenta las aventuras de los descendientes de Esmond.

La hija de éste y de lady Castlewood, Raquel, ha casado con un tal Warrington, y del matrimonio han nacido dos gemelos Enrique y Jorge. A Jorge se le cree muerto por haber des­aparecido en la guerra contra los franceses. Enrique, enfermizo, marcha a Inglaterra para cambiar de aires. Allí va a visitar el castillo de sus antepasados donde vive lord Castlewood con su hermano Will, dos her­manas y una vieja pariente autoritaria, la baronesa Bernstein, que no es otra que la Beatriz de Esmond. Enrique es inmediata­mente asediado por lady María, la cuaren­tona hermana de lord Castlewood, la cual, atraída por las pingües riquezas que el jo­ven heredará, consigue sacarle una promesa de matrimonio. La baronesa Bernstein, que siente una viva simpatía por el joven ame­ricano, le abre los ojos sobre los verdade­ros sentimientos de lady María, pero Enri­que ya no puede volverse atrás en su pala­bra de caballero.

La llegada inesperada de Jorge resolverá la situación, ya que Enri­que, segundo gemelo, no será el heredero de la fortuna de los Warrington y María le devuelve su palabra. Regresa entonces a su país nativo, donde se casa con una joven americana, Fanny Mountain. Jorge, entre tanto, permanece en Inglaterra, se enamora de Theodosia Lambert y contrae matrimonio contra la voluntad de su madre. Comparada a las otras novelas de Thackeray, y en es­pecial a la Historia de Enrique Esmond, esta obra resulta débil, particularmente en la construcción de la trama. Los defectos comunes a las otras obras de Thackeray, esto es, la falta de unidad, la excesiva ex­tensión de ciertos episodios que diluyen la acción y la debilitan, son aquí más sensibles, al paso que las grandes cualidades del nove­lista se afirman menos claramente.

Algunos personajes, sin embargo, están al nivel ar­tístico de los mejor logrados de Thackeray. Entre todos sobresale brillante el de la vieja y enérgica baronesa Bernstein, Will Esmond y el capellán Sampson. La última parte de la narración se desarrolla en los tiempos de la guerra de la Independencia americana y en ella aparecen las figuras del general Wolfe y de Washington.

S. Rosati

No era en verdad un cínico ni un «cen­sor morum», sino (de distinto modo que Chaucer) un afable tolerante; porque ha visto las debilidades, a veces es débil en la exposición. (Chesterton)

La imaginación creadora de Thackeray trasciende al orden moral que impone a la expresión, pero también se manifiesta en su manera de presentar la historia. (D. Cecil)