Los Horrores de Bulgaria y la Cuestión de Oriente, William Ewart Gladstone

[Bulgarian Horror s and the Question of the East]. «Panfle­to» o ensayo político publicado en 1876 por el estadista liberal William Ewart Gladstone (1809-1898) durante la ardiente polémica que se suscitó en Inglaterra a propósito de las matanzas, efectuadas por los turcos en Bul­garia, donde había estallado una revuelta contra el gobierno del Sultán. El opúsculo es notable tanto por la ocasión histórica como por la luz que arroja sobre la situación in­terna de la Inglaterra victoriana.

Disraeli, que era jefe del gobierno, respondiendo a las preguntas parlamentarias, trató de quitar importancia a las matanzas búlgaras di­ciendo que eran exageraciones. Pero la opinión pública se sublevó ante las revela­ciones de los periódicos, y el liberal Glads­tone, que desde hacía algún tiempo se había retirado de las luchas parlamentarias, atacó al gobierno acusándolo de lentitud y algo más en procurarse y dar al Parlamento las necesarias informaciones, y criticando sobre todo la orden dada a la flota de zarpar para la bahía de Besika con el fin de proteger a los súbditos ingleses: orden que los turcos y las naciones europeas interpretaban como una amenaza contra Rusia y una promesa de apoyo a Turquía. En su opúsculo, Glads­tone examina críticamente las falsedades y los silenciamientos del gobierno, insistiendo sobre la ofensa a los sentimientos de hu­manidad cometida con la atenuación de la gravedad de los hechos y con haber hecho surgir la idea de que Inglaterra apoyaba a Turquía incluso en sus crueldades. Él aná­lisis de la política del gobierno conservador es ceñido y magistral, y termina con la petición de que se conceda a las provincias cristianas de Turquía una autonomía plena y que los funcionarios turcos sean retirados, para evitar la repetición de estos inevitables incidentes. Pero la clase dirigente, que veía a Constantinopla y los Estrechos amenazados por Rusia, protestó contra el sentimentalis­mo de Gladstone y le presentó como vendido al Zar.

El único efecto de la propaganda de Gladstone fue llevar al gobierno a ser toda­vía más intransigente con Rusia, para satis­facer los sentimientos imperialistas de Ingla­terra, y así entre Turquía, que con razón se creía apoyada por Inglaterra, y la ofendida Rusia, estalló la guerra de 1877, que se resolvió rápidamente con la victoria rusa. Inglaterra fue presa de un delirio imperia­lista (entonces surgió el llamado «jingoísmo», el «chauvinismo» más histérico que se haya visto nunca), que parecía haberla de conducir fatalmente a la guerra; pero inter­vinieron las demás potencias y se reunió el Congreso de Berlín (1878), que dio a la península balcánica una configuración que duró, en líneas generales, hasta 1912.

M. M. Rossi