[The Spanish Tragedie]. Drama del inglés Thomas Kyd (1558-1594), escrito entre 1586 y 1587 para satisfacer el gusto del público, que pedía nuevas producciones de este género. Llegó a nosotros anónima, en una edición inquarto, sin fecha, y en otra de 1602, con adiciones de otro autor, de superior valor literario (la tradición quiere que este autor sea Ben Jonson, aunque el estilo no nos autoriza a creerlo).
Podría llamarse éste el drama de la venganza. Horacio, hijo de Jerónimo, Grande de España, es asesinado bárbaramente mientras está hablando de amor con la princesa Bellimperia. Ésta y el padre del asesinado juran descubrir y castigar a los asesinos. Para alcanzar su fin el viejo Jerónimo simula enloquecer por el dolor; cuando se entera de que Bellimperia está obligada a casarse precisamente con el hombre que él ha identificado como el asesino de su hijo, propone que en la boda se represente una tragedia. Pero la tragedia no será simulada: se vivirá en todo su horror, ya que todos los invitados serán muertos o tendrán que matarse ellos mismos. Kyd debe mucho a Séneca, no tanto en la estructura de la obra como en sus escenas de horror, en la idea del fanasma que en el prólogo cuenta los acontecimientos pasados, y en los monólogos a menudo transidos de un grandilocuente lirismo.
Hábil en la mezcla de los motivos pasionales y poéticos con los horripilantes, Kyd no se preocupa de estudiar los caracteres, lo cual era, por lo demás, superfluo para un público que sólo buscaba lo horroroso. El éxito de La tragedia española fue enorme y duradero, y no hay que excluir la posibilidad de que su fórmula melodramática haya inspirado el Hamlet (v.) de Shakespeare, aunque no sea debida a Kyd la primitiva redacción del Hamlet.
M. Navarra