[Instructions sur les états d’oraison]. Obra de Jacques-Bénigne Bossuet (1627-1704), publicada en 1697. En su lucha contra el quietismo (teoría que aspiraba a conducir de nuevo la religión a la contemplación interior, donde se hallan el reposo y la calma mística) el famoso obispo de Meaux había conseguido que Fénelon y Madame Guyon, los mayores exponentes de aquella corriente espiritual, suscribiesen un formulario que aspiraba a revalorar las prácticas de la piedad y del culto. Con las instrucciones quiso precisar las cuestiones relativas al dogma para evitar en los fieles discusiones y titubeos en materia de piedad y de culto o imprecisiones en la interpretación de las Escrituras. Rígidamente ortodoxo, combate como un fiel soldado por la unidad de la Iglesia. Más allá de tendencias místicas y peligrosamente ligadas con una experiencia personal — bastaría las póstumas Meditaciones sobre el Evangelio (v.) para indicar la pasión interior del devoto y del pastor de almas — Bossuet aspira a consolidar cada vez más, sobre la base del catolicismo tridentino, la sociedad de los fieles, las normas para la inteligencia de la Biblia según el magisterio del sacerdocio, y finalmente la validez firme e inconcusa de la fe tradicional. Fénelon, entonces recientemente nombrado arzobispo, cuando conoció el manuscrito de la obra de Bossuet, quiso que su publicación estuviera precedida de su Explicación de las Máximas de los Santos, en las cuales remachaba sus principios quietistas. Pero la polémica se reanudó más viva, y llegaría por parte del intransigente Bossuet a su Relación sobre el Quietismo (v.) y a la condena de Fénelon por parte de la curia papal.
C. Cordié