[Der Wehrwolf]. Novela de Hermann Löns (1866-1914), publicada en 1910. El autor la escribió en doce días, y la titula crónica de campesinos.
Es la historia de una comunidad de campesinos de la Baja alemania durante la guerra de los Treinta Años, cuya aldea ha sido destruida por hordas de soldados desorganizados y convertidos es bandoleros. Bajo la guía del aldeano Harm Wulf, cuya mujer e hijos han sido bárbaramente asesinados por la soldadesca y que ha jurado vengarse, se unen y forman una especie de liga defensiva cuya única finalidad es librar al país de las bandas de bandidos e incendiarios que lo infestan. Consiguen reconstruir su aldea en otro lugar, la vida reemprende su ritmo, siembran, se casan, nacen los hijos, resurge la atmósfera de serenidad. Pero, para conservar esta serenidad, los «hombres lobos» o «lobos defensores» (whren=defenderse) han de sofocar todo instinto de dulzura, han de armarse de una infinita crueldad contra sus enemigos, de una crueldad que no conoce tregua. Matan despiadadamente a quien lleva el desorden al pequeño reino que han conseguido crear en su pueblo. Cuando, por fin, vuelve la paz, después de veinticinco años de guerra, se sienten como liberados de una diabólica pesadilla y tratan de olvidar los años de sangre en el fecundo trabajo sin peligros. La novela es una glorificación de los campesinos que tanto contribuyeron a la vida de la nación. Löns es un precursor de las aspiraciones nacionalsocialistas: sus campesinos tienen como enseña dos cepos superpuestos que forman una esvástica. Sus personajes son vigorosos, llenos de una fuerza ruda y primitiva, y hablan un lenguaje lleno de color, mezclado con palabras dialectales que dan un particular encanto a la narración.
G. Guerrieri