[L’Homme des champs ou les Géorgiques françaises]. Poema en cuatro cantos del francés Jacques Delille (1738- 1813), publicado en. 1802 y con sucesivas refundiciones en 1805. Si la laboriosa traducción de Virgilio muestra la maestría estilística de un escritor sin genialidad inventiva, y los mismos Jardines (v.) se reducen a ser una árida enumeración de preceptos sobre agricultura y costumbres agrícolas, este poema tiende a mostrar la sabiduría del que vive en la naturaleza y se entrega al encanto de una nueva verdad evidente por sí misma, en una paz que es una conquista espiritual. Tras un canto a la tranquilidad del alma y al colorido de los jardines ingleses (I), el artista exalta al cultivador que se sirve de la naturaleza para sustentarse a sí mismo y a sus semejantes y que civiliza la fuerza misma de las cosas (II); seguidamente se extiende en observaciones de buen naturalista, sobre el espectáculo de todo lo creado y acerca de la variedad de las plantas y de los animales, como si se tratara de un gabinete de historia natural al aire libre (III) y, finalmente, celebra la naturaleza sencilla y grandiosa, fiel amiga de los hombres que se refugian en su seno. La obra se sitúa voluntariamente como un nuevo canto geórgico del pueblo francés y pretende afirmar, con facilidad y decisión, los sentimientos que desde Bernardin de Saint-Pierre a Rousseau eran ya del común patrimonio espiritual. Ello contribuyó a dar fama a un trabajo carente de espontaneidad y de verdadera poesía.
C. Cordié