[Rosengarten]. Poema épico austríaco llamado con más precisión Gran jardín de las rosas [Grosser Rosengarten], para distinguirlo del Laurin (v.) o Pequeño jardín de las rosas. Escrito hacia 1250 por autor desconocido, se relaciona con el ciclo de los Nibelungos. El metro está constituido por cuartetos, cuyo último hemistiquio puede no llevar los cuatro acentos y cuya rima puede ser sustituida por asonancias.
Kriemhild (v. Crimilde), hija del rey Gibich, posee en Worms una magnífica rosaleda, custodiada por doce guerreros, entre los que se halla el valeroso Sigfrid von Niederland (v. Sigfrido), que aspira a la mano de la hija del rey. Orgullosa de esta corona de héroes, Kriemhild invita a Dietrich von Bern (v. Teodorico) a venir de la Marca oriental con doce guerreros que puedan contender con los suyos del Rin. Para que lleguen a doce, Dietrich invita también al hermano de Hildebrand, al monje Ilsan, que lleva ya veinte años de vida claustral. Con el número completo, llega Dietrich a Worms, y aquí comienza una violenta contienda en la que sale vencedor precisamente el monje Ilsan, el cual, tras abatir a Volker von Alzey, tiene campo libre y saborea el placer del premio concedido, que consiste en una corona de rosas y el beso de Kriemhild. Entretanto, también la batalla entre Sigfrid y Dietrich termina con la victoria de este último, así es que los doce guerreros renanos quedan completamente vencidos frente a los doce Amelungos.
Pero el monje Ilsan no está contento con un solo premio y desea obtener cincuenta y dos coronas de rosas para llevarlas a los cincuenta y dos frailes de su convento, por eso lucha con otros tantos héroes, y en cada combate gana la corona de rosas y el beso, hasta que con sus duras barbas hace brotar sangre de los delicados labios de Kriemhild. Los vencedores vuelven contentos a su patria, y Gibich, el padre de Kriemhild, ha de resignarse a que su tierra sea feudo del vencedor Dietrich. En cuanto al fraile Ilsan, coloca sobre la tonsura de cada uno de sus hermanos de religión la espinosa corona de rosas y les ordena que hagan penitencia por sus pecados. Como ellos no quieren obedecer, les ata por la punta de las barbas, suspendiéndoles en fila de una viga hasta que consienten en obedecerle.
El poema se ha conservado en diversas refundiciones, que tienen de 390 a 600 estrofas. El nudo de la narración reside en la lucha entre los dos héroes mayores de la épica nacional, es decir, Dietrich y Sigfrid. En forma dramática se repite en los llamados Espectáculos de Vipiteno, escritos por Virgil Raber, entre 1510 y 1535
M. Pensa