Sabed que mi nombre se perdió (Juan Tazón)

Sabed que mi nombre se perdió

Sabed que mi nombre se perdió

Después de su oscura e insinuante novela “los caballeros de las Sombras”, Juan Tazón nos transporta de nuevo a las intrigas imperiales españolas con esta obra, acaso un poco menos tenebrosa que al anterior, pero habitada por los mismo personajes inolvidables y la misma trama certera.
El capitán Alonso Cobos, veterano de los Tercios De Flandes, volverá a internarse en los laberintos de las tensas relaciones entre españoles y británicos, católicos, anglicanos y protestantes y, sobre todo, en los enfrentamientos personales entre los distintos ministros y validos, que intentan, cada cual por su lado, utilizar los resortes del poder en su favor.

Estamos en la época de Felipe II y la lucha contra los ingleses. Los irlandeses está en medio, católicos y enfrentados a los británicos ya por viejos rencores. ¿Cual es el papel de España, principal potencia del mundo y amparo del catolicismo? ¿Qué se puede hacer a las claras y qué debe permanecer oculto?
La novela, más que una continuación de la obra anterior de Tazón, es una explicación de los orígenes y carácter de su protagonista: sus primeros pasos, su encuentro con Idiáquez, y los hechos que fueron forjando su temperamento.
Compuesto en un estilo bien elaborado, la principal baza de Tazón es el conocimiento de la época y el manejo de los escenarios, que no son solamente el lienzo sobre el que se trazan los hechos, sino parte muy significativa de todo lo que sucede.

Pretendiéndolo o no, el autor transmite al ida de que cada tierra cría sus hombres, y cada tipo de hombre moldea la tierra que habita, en una unión más intima de lo que a menudo queremos reconocer.

Quien sólo busque una novela histórica quizás la encuentra demasiado embebida en sus propias reglas y normas, pero para el aficionado a la época y el entusiasta de la precisión, es una novel imprescindible.