Relación De La Tierra Descubierta Por Orden De Su Majestad, Giovanni Verrazano

[Relazione della térra scoperta per ordine di sua Maestá]. Es una carta-relación que el florentino Giovanni Verrazano (1485?- 1527?) escribió el 8 de julio de 1524, desde el puerto de Dieppe, al rey de Francia Francisco I, para darle cuenta de la nave­gación y el descubrimiento de nuevas tie­rras efectuadas por él en la primera mitad del mismo año.

Del original francés — des­aparecido — existen varias traducciones ita­lianas: una, bastante incorrecta, en el Códice Magliabechiano; otra, más correcta, pero carente de la parte cosmográfica, en la recopilación de Ramusio, y una tercera, correcta y completa, recientemente hallada por Alessandro Bacchiani, que se encuentra ahora en poder de los condes Macchi di Cellere en Roma. En ella Verrazano narra cómo, después de zarpar en la nave «Delfina», de cerca de 100 toneladas, con 50 hombres y provisiones para ocho meses, desde un islote próximo a Madera, el 17 de enero llegó, después de una terrible tor­menta, a las costas de América, hacia los 34° de latitud Norte, cerca del actual cabo Fear. De allí, después de una breve nave­gación hacia el Sur, se dirigió hacia el Nordeste y siguió la costa, hasta entonces desconocida, de América septentrional; tras costear la actual Carolina y Maryland, entró y exploró el estuario del río que tomó más tarde el nombre de Hudson y donde surgió Nueva York.

Siguió hacia el Nordeste y encontró una isla, a la que dio el nombre de Luisia y que según algunos geógrafos se­ría la actual Block, y según otros Martha’s Vineyard. Descubrió cerca de ella un buen puerto (Newport) y permaneció en él cerca de quince días, estudió el carácter y las costumbres de los habitantes, de los que da una cuidadosa descripción. Volvió a zar­par el 5 de mayo, siguió las costas de Massachussetts y Maine, que compara a las de Dalmacia y, después de haber navegado du­rante 150 leguas más, alcanzó las tierras descubiertas ya por Cabot cerca de los 50°. En este punto, llegado al término de sus provisiones, dirigió la proa hacia Francia y terminó así su viaje. El objetivo de la expedición era la búsqueda del paso del Noroeste del Atlántico al Pacífico; sirvió en cambio para establecer la gran extensión en latitud de América, descubrió y exploró todas las costas de los actuales Estados Uni­dos y demostró que las tierras (Labrador y Terranova) descubiertas por Cabot al Nor­te, y la Florida, descubierta por Ponce de León en 1522, al Sur, distantes entre sí unos 20° de latitud, pertenecen a un mismo continente.

P. Gobetti