[La bona gent). Obra teatral en cuatro actos del dramaturgo catalán Santiago Rusiñol (1861-1931), representada en 1906. El autor nos presenta en la figura de Batista, personaje de curiosa moral, a un tipo muy semejante al señor Esteve (Las aleluyas del señor Esteve, v.). Batista tiene una casa cié empeños, negocio con el que, además de ganar dinero, está convencido de que favorece a los pobres. Como su matrimonio con la criada no le ha dado descendencia, decide adoptar una hija. Ésta es Mariagna, una dulce criatura, que llevará la alteración en el alma misma de Batista, pues acabará por enamorarse de ella e impedirá su matrimonio. Batistet, el sobrino, que la cortejaba, la abandona al saber que si toma esposo Batista la desheredará. El bohemio Rafel, otro sobrino de Batista, consigue el amor de Mariagna y se casa con ella. Años después, Batista, enfermo y viejo, es asistido por los parientes que velan su fortuna. En un momento de generosidad consiente en ver a Mariagna y se dispone a dejar su herencia a los pobres. Pero de nuevo se repliega sobre sí mismo y se casa con Joana, la criada, después de expulsar a los familiares. Esta obra, como la anteriormente citada, quiere ser una sátira contra la burguesía catalana de finales del siglo pasado y principios del actual. La buena gente son Batista y sus parientes, externamente honrados, pero sin ninguna nobleza espiritual.
A. Comas