[Quarante ans de théátre]. «Apéndices dramáticos» de Francisque Sarcey (1828-1899), publicados póstumamente en ocho volúmenes entre 1900 y 1902, a cargo de Gustave Larroumet y Adolphe Brisson. Espectador de gusto y discreto conocedor de los clásicos, Sarcey mantuvo desde 1860 hasta su muerte lo suficientemente bien su cargo de informador amable y brillante, pero muy predispuesto a seguir el gusto medio del público burgués, a buscar el teatro bien representado, «teatral».
De esta manera, gran parte de sus preferencias están encaminadas hacia obras de escaso interés artístico, solamente por el hecho de que están llenas de sentimiento y de espontaneidad escénica. Acerca de la Hija de Rolando [La filie de Roland] de Henri de Bornier (representada en 1875 y más tarde en 1890) dice que es «el más bello esfuerzo hacia lo grandioso que se ha hecho en estos últimos cincuenta años», y más tarde escatima sus elogios a las obras de Becque, tanto a Los cuervos (v.) como a la Parisiense (v.). Estos artículos, recopilados en varias series, dan la impresión de amables divagaciones, distribuidas según los diferentes temas: sobre crítica, sobre las leyes del teatro, y sobre la institución de la Comédie Française (I); sobre Moliere y la comedia clásica (II); sobre Corneille, Racine y Shakespeare (III); sobre Hugo, Dumas, Scribe, Delavigne, Balzac, Labiche y otros (IV). Los volúmenes que siguen son más dispersos y contradictorios en la materia, ya que tratan de Augier, Feuillet, Dumas hijo (V), Sardou, Meilhac y Halévy, Pailleron, Becque, Daudet (VI), y después Zola; Coppée, Claretie; de Curel, Aicard y otros contemporáneos (VII). El último volumen une sus impresiones sobre el teatro de Maeterlinck con recensiones de obras de Lavedan, Courteline, Rostand y Hervieu.
Sin llegar a formar una obra verdadera, estos Cuarenta años de teatro ofrecen siempre noticias sobre obras ya olvidadas y sobre evocaciones del teatro clásico; más notables son las páginas en que Sarcey discute el valor de las primeras obras teatrales de la escuela naturalista o trata de resolver el contraste que existe entre el teatro romántico y el tradicional francés.
C. Cordié